domingo, 30 de enero de 2011

Elegimos nuestra casa, coche, un trabajo, la ropa que nos pondremos mañana, si queremos el café solo o con leche.. pero hay cosas que vamos adquiriendo con el paso del tiempo, que no elegimos, entre ellas nuestra personalidad, esta es la forma en que pensamos, sentimos y nos comportamos, cada uno lo hacemos de manera diferente,ya que vemos la vida con ojos diferentes y reaccionamos según nuestros sentimientos o impulsos.
La personalidad esta determinada por los genes, pero el ambiente y las experiencias de la vida (padres, sociedad, amistades, cultura..)y se ocupan de moldear todas esas posibilidades en una dirección u otra. Por eso, aunque podamos cambiar nuestra forma de ser, lo hacemos basandonos en esas características de personalidad con las que hemos venido al mundo.

Muchas veces no es necesario el lenguaje oral para comunicarse con los demás, en ocasiones con un abrazo decimos mucho mas que con mil palabras es verdad que depende de la situación esto varía, pues no reaccionamos de igual manera si un desconocido nos abraza por la espalda o es un amigo al que hacía mucho tiempo que no le veías ya que son sentimientos muy diferentes. A todos nos gusta que nos demuestren que nos quieren, que nos apoyan y para ello no son necesarias las palabras.

Es sorprendente como una palabra, o pequeño mensaje o dibujo puede identificar y asegurar o autentificar la identidad de una persona.La firma es un gesto automatizado,que elegimos inconsciente o semiinconscientemente y trazamos sin ningún tipo de reglas.

Esta dice muchas cosas de la persona que la realiza, puede mostrarte si es una persona enérgica, ambiciosa, si es tranquila, simple o inmadura.. se podría decir que es un pequeño retrato de lo que somos o de lo que simplemente queremos ser.
Nuestro cuerpo responde a unos estímulos que mostramos con expresiones y reacciones espontáneas reflejando así nuestro carácter, temperamento..
El cuerpo responde impulsivamente, si no lo tuviéramos no tendríamos que frenar nada, pero como lo tenemos estamos obligados a aprender a controlar no solo a nuestro cuerpo sino mas bien a nuestro intelecto, voluntad y emociones.
Estas reacciones se pueden mostrar a través de algo tan común como la firma o tan simple como un gesto, una mirada..